La bodega Lar de Maía es una bodega familiar que combina la elaboración tradicional del vino con una gran pasión por la tierra. La joven empresa se ha propuesto elaborar vinos de forma natural y especialmente sostenible. Los propietarios cuidan personalmente cada parte del proceso con esmero para conseguir siempre los mejores resultados. El resultado son vinos con un carácter inconfundible que apelan a todos los sentidos al degustarlos.
La bodega Lar de Maía fue fundada en 2015 por experimentados enólogos. Desde entonces, la intención de los enólogos María Burgoa y Raúl Tamayo ha sido elaborar vinos de calidad de forma artesanal y sin aditivos, garantizando así la máxima naturalidad de los productos. El resultado son vinos que hablan por sí solos e impresionan por su gran individualidad. Esto se refleja en el sabor y el aroma de cada vino, mientras que el aspecto y el tacto de las botellas cuidadosamente diseñadas invitan a elegir los productos de la bodega Lar de Maía.
La bodega Lar de Maía concede gran importancia a la continuidad y la tradición. Se centra en la producción sostenible y tradicional, razón por la cual se prefieren las uvas procedentes de viñedos centenarios. La inserción de los viñedos en un paisaje a pequeña escala contribuye a la preservación de un ecosistema sostenible, al tiempo que se utilizan procesos tradicionales para el cultivo, la vendimia y la transformación. La evitación de métodos industriales sirve para proteger el medio ambiente y permite que las uvas se desarrollen de forma especialmente natural. Las selecciones escogidas y los métodos especiales de almacenamiento realzan la excelencia que se percibe en la alta calidad gustativa de cada vino de la Bodega Lar de Maía.
La ubicación óptima de la Bodega Lar de Maía en el paisaje montañoso de Castilla desempeña un papel importante, ya que el microclima especial facilita el desarrollo de vinos de alta calidad. Los viñedos tienen entre 50 y 100 años de antigüedad y aprovechan los mejores emplazamientos, enclavados en un paisaje variado de campos de cereales, olivares y tomillares. Una característica especial es la variada estructura del suelo, que permite a las vides desarrollarse sobre arena, arcilla, piedra caliza y grava, lo que les permite desarrollar su propia individualidad. Las variedades de uva Tempranillo, Garnacha y Syrah utilizadas acentúan el sentido de la tradición en Lar de Maía y ofrecen oportunidades perfectas para crear vinos tintos y rosados con un sabor fascinante.