Albariño
La uva Albariño brilla con luz propia en el firmamento de las variedades blancas españolas. Este cultivar, sinónimo de frescura y elegancia, ha trascendido fronteras, consolidándose como una joya enológica, particularmente en el noroeste de España. Saber más
Con una historia que se entreteje con leyendas de monjes y tradiciones ancestrales, el Albariño ha sabido adaptarse y expresar la riqueza de su terruño, siendo no solo el alma de los vinos de Rías Baixas sino también un estandarte de calidad y tradición.
Principales Zonas de Cultivo en España
La Albariño encuentra en Galicia, especialmente en la DO Rías Baixas, su más preciado bastión. Los viñedos gallegos, con sus características pérgolas, son un emblema de la viticultura de la región, permitiendo a las uvas madurar lejos de la humedad del suelo y beneficiarse de una óptima exposición solar. Además de Rías Baixas, regiones como Ribeiro y Valdeorras también acogen a esta noble variedad, a menudo mezclada con otras uvas de carácter atlántico en la búsqueda del equilibrio y la complejidad.
Características Organolépticas
Los aromas de los vinos de Albariño evocan la frescura de los cítricos y el dulzor de los melocotones. La variedad se distingue por una acidez vibrante, y a pesar de su ligereza intrínseca, el Albariño tiene una estructura firme, cuya presencia en el paladar es inconfundible. En ocasiones, según el terroir y la elaboración puede mostrar un marcado carácter mineral.
Estilos Típicos de los Vinos de Albariño
Desde los joviales y vivaces vinos jóvenes hasta los complejos y estructurados vinos criados en roble, el Albariño demuestra una versatilidad admirable. Los vinos trabajados sobre lías añaden una dimensión cremosa y profundidad al perfil del vino. Si bien la variedad se expresa magníficamente en solitario, no es raro encontrarla en blends donde complementa y realza el carácter de otras uvas, ofreciendo una mayor complejidad.