Ubicada en el corazón de Cataluña, la bodega Clos Montblanc se inspira en el entorno histórico de la ciudad medieval de Montblanc para elaborar vinos con carácter. Desde su fundación, la visión de Luis Carbonell ha sido clara: fusionar la riqueza histórica y el terroir único de la región para crear vinos que brillen a nivel internacional.
Con raíces que se extienden a lo largo de varias generaciones de viticultores, Clos Montblanc combina tradición artesanal con innovación. En sus inicios, la vinificación se realizaba en recipientes tradicionales sin control de temperatura, un enfoque que sentó las bases de una filosofía que honra sus orígenes y apuesta por una producción sostenible y responsable.
La bodega destaca por su compromiso con la naturaleza, cultivando sus viñedos de forma ecológica en suelos de pizarra, arcilla y caliza. Estos terrenos, ubicados en torno a la finca Masía Les Comes, gozan de un clima mediterráneo con influencia continental y altitudes entre los 600 y 700 metros. Este entorno permite una maduración lenta de la uva, favoreciendo vinos con gran intensidad aromática y equilibrio.
En la bodega, la enóloga Carla Artiol dirige una vinificación cuidadosa que realza las particularidades de cada variedad: Macabeo, Chardonnay, Garnacha Blanca, Garnacha Tinta, Cabernet Sauvignon, Trepat y Monastrell. El resultado son vinos que expresan su origen con autenticidad, reflejando una herencia vitivinícola transmitida de generación en generación.