Viladomat Aragó

La bodega Viladomat Aragó se fundó en 2019, pero su historia se remonta a 2010. En ese momento, Gerard Maristany decidió poner fin a su carrera periodística y dedicarse por completo a la viticultura. Su viaje comenzó en California en Golden State Wine antes de regresar al Penedès. Allí trabajó durante cinco años en la reconocida bodega de espumosos Recaredo y reconoció el potencial de las variedades de uva Xarel·lo y Macabeo para los vinos blancos de larga crianza. Desde 2018 vinifica pequeñas cantidades de uva procedente de viñedos familiares y de amigos viticultores del Penedès junto con su compañero enólogo Martí Torrallardona.

Viladomat Aragó concede gran importancia a la gestión sostenible. Los viñedos de Vilafranca del Penedès y Olèrdola, con suelos profundos, arcillosos y calcáreos, producen vinos con acidez viva y graduación alcohólica moderada. En la bodega, la fermentación se realiza de forma espontánea con las levaduras naturales de la uva, lo que permite que los vinos conserven su originalidad.

Viladomat Aragó trabaja con paciencia: los vinos maduran durante mucho tiempo y solo salen al mercado cuando han alcanzado su máximo potencial.

Un ejemplo destacado de ello es “L’Esperit de l’AP-7”. Este vino principal se elabora a partir de parcelas calcáreas, cada una se vinifica por separado y se cría durante diez meses en recipientes diferentes. El vino base madura luego en botella durante un año más. Los nombres de los vinos de Viladomat Aragó a menudo abordan el conflicto entre las estructuras rurales y urbanas. La autopista AP-7 es un ejemplo de la pérdida de valiosos viñedos debido a proyectos de infraestructuras. Sin embargo, Viladomat Aragó conserva con pasión la tradición vinícola de la región y produce vinos con carácter, profundidad y una longevidad impresionante.