Bodega Balcona

La historia de la Bodega Balcona comenzó con una mujer excepcional. Fue la abuela de la actual enóloga Josefa Fernández y sus cuatro hermanos. Ellos la llamaban "La Balcona" porque vivía en una casita con balcón en la ciudad. En una época en la que era inusual para una mujer, ella comenzó con el cultivo de la vid. Hoy en día, sus nietos cuidan de las vides y cuentan con más de 30 años de experiencia en viticultura. Y esta experiencia da sus frutos. La cosecha es tan abundante que solo una fracción de ella es suficiente para la producción propia.

El cultivo en la Bodega Balcona sigue el principio ecológico. Un gran inspirador fue el reconocido conocedor del vino Lluis Pèrez Verdú, quien en los años 90 viajó por el sur de España compartiendo sus conocimientos sobre la buena viticultura. Él consideraba que el factor más importante era la sostenibilidad ambiental. Según su opinión, la cosecha es más abundante y de mayor calidad cuando no se utilizan fertilizantes químicos. Este principio es el que sigue la Bodega Balcona. Los principios de la ecología, junto con el conocimiento de los antepasados, han llevado a cosechas exitosas y productos que son demandados internacionalmente.

La comunidad de Bullas forma parte de una región paisajística árida con días calurosos y noches frías. Sin embargo, la bodega se beneficia de un nivel freático elevado, que proporciona suficiente riego. La vegetación está compuesta principalmente por plantas de Monastrell de más de 60 años, que se han adaptado perfectamente al terroir de cal y arcilla. Las noches frescas retrasan el tiempo de maduración y son la base para un excelente equilibrio entre fruta y acidez, lo que hace que los vinos de Bodega Balcona sean tan populares. Destacan especialmente el "Jungwein Mabal Monastrell Organic" y el "Selección 37 Barricas".