Bodegas Paniza representa la fusión entre tradición y modernidad en el corazón de Aragón. Desde 1953, alrededor de 300 viticultores se han unido para elaborar vinos que reflejan el carácter de sus suelos pedregosos y secos. Gracias a la combinación de tecnología de vanguardia y una experiencia profundamente arraigada, producen vinos tintos, blancos y rosados con una identidad regional inconfundible.
Los orígenes de Bodegas Paniza se remontan a 1953, cuando un grupo de viticultores fundó el proyecto "Nuestra Señora del Águila", sentando así las bases de una de las cooperativas vinícolas más importantes de Aragón. La adquisición de su propia línea de embotellado en 1982 permitió comercializar los vinos bajo su propia marca. En 1996, la cooperativa construyó una moderna bodega y, alrededor de 2010, implementó nuevos estándares tecnológicos que la posicionaron rápidamente en el ámbito internacional. En 2015, se inauguró un nuevo edificio de diseño vanguardista, reflejando visualmente la constante evolución de la bodega. Actualmente, Bodegas Paniza cuenta con unas 3.000 hectáreas de viñedos en la D.O. Cariñena, con sus parcelas más antiguas situadas a 850 metros de altitud, donde se producen vinos elegantes y con una marcada expresión del terroir.
En el viñedo, Bodegas Paniza apuesta por un equilibrio óptimo entre variedades autóctonas e internacionales. La Garnacha y la Cariñena conviven con Tempranillo, Chardonnay y Syrah, logrando expresar su mejor perfil aromático en suelos calcáreos y de pizarra. Muchas de estas parcelas, asentadas sobre terrenos áridos y pedregosos, se benefician de un clima continental extremo, con veranos calurosos e inviernos fríos. Este contraste térmico favorece una maduración intensa de las uvas, preservando al mismo tiempo una acidez vibrante.
Bajo la dirección del enólogo Álvaro Campos, la vendimia se realiza de manera selectiva y las uvas son tratadas con esmero en la bodega para potenciar al máximo sus características varietales y la impronta del terroir. La combinación de tecnología avanzada y métodos de vinificación tradicionales permite dotar a cada vino de un estilo propio, desde el fresco y afrutado rosado hasta el blanco elegante y el tinto estructurado. Esta armonía entre el respeto por la tradición y la apertura a la innovación tecnológica ha sido la clave del éxito de Bodegas Paniza, ofreciendo una amplia gama de vinos de alta calidad.