Bodegas y Viñedos Pinuaga

Desde su fundación en 1960 por Valentín Pinuaga Salazar, la bodega se ha caracterizado por su conexión con la vinificación tradicional y el cultivo de exclusivos clones de Tempranillo, conocidos localmente como Cencibel. Un logro destacado de su historia reciente es la medalla de plata obtenida por el Pinuaga La Senda 2017 en el prestigioso certamen Millésime Bio, que refleja su compromiso con la calidad en la producción ecológica.

Bodegas y Viñedos Pinuaga combina métodos tradicionales con un enfoque de responsabilidad ambiental, gestionando sus viñedos con esmero y dedicación. Las variedades Viognier, Airén, Tempranillo y Verdejo prosperan en las mejores parcelas de la finca, como Montechico y El Moro. Los suelos, que combinan arena, arcilla, caliza y elementos pedregosos, ofrecen condiciones óptimas para el cultivo y contribuyen al carácter único de los vinos. En particular, el viejo clon del Tempranillo, conocido como Cencibel, ocupa un lugar central en la producción, dando lugar a vinos con notable profundidad y elegancia.

En la bodega, el enólogo Ángel Jesús Martínez asegura que la calidad de las uvas se conserve mediante una intervención mínima durante el proceso de vinificación. Entre los vinos más destacados está el Pinuaga 200 Cepas, un Tempranillo 100% elaborado con uvas de viñas de más de 65 años, que envejece durante 14 meses en barricas de roble francés y americano, reflejando la esencia de la bodega. Otro ejemplo notable es el Pinuaga Colección, producido a partir de una única parcela llamada “La Lastra” y envejecido durante 9 meses en barricas de roble. Esta combinación de trabajo cuidadoso en el viñedo y en el proceso de vinificación convierte a los vinos de Bodegas y Viñedos Pinuaga en auténticos embajadores de su región.